En la soledad de los campos de algodón

Esa grieta, cada vez mayor, entre quién tiene y quién necesita

Una obra conmovedora y revulsiva que plantea la necesidad de diálogo entre las personas para evitar una fractura de consecuencias terribles. Un viaje a los entresijos del deseo y la frustración, de las pasiones y las indiferencias.
‘En la soledad de los campos de algodón’ ha sido distinguida por la crítica especializada como el texto clave de la dramaturgia francesa de final de siglo.
Como dos continentes que no cesan de alejarse, los protagonistas se ven enfrentados a la última oportunidad para no perderse… La gran fuerza de este texto es que no se limita a nada, atraviesa, traspasa y trasciende todos los temas que trata y se acerca por su desnudez, su limpieza y su fuerza poética, al diálogo filosófico

La fuerza y la tensión emergen directamente del discurso, del tremendo cuerpo a cuerpo de palabras que asumen sus personajes. Con una valentía insólita en nuestro medio, esta valiosa producción juega el drama en su más peligrosa y rica corriente de combate dialéctico.

José Enríquez. Guía del Ocio

Dos actores excelentes, que creen en lo que hacen y en lo que dicen, que defienden bien sus posturas antagónicas, que se mueven y hablan a la perfección. La función posee ese sello de lo bien hecho, y se disfruta sobre todo si el espectador conoce previamente qué clase de teatro se ha elegido.

Enrique Centeno. Diario 16


Un lenguaje metafóricamente desbordante, excitante, con un bosque de palabras,
espeso, escurridizo. Inmensa fuerza literaria que domina todo. Algo que ha visto bien Michel López. En su puesta en escena se intuye que ha querido permanecer casi invisible, para que el texto se oiga y se sienta en su intensidad. Limpio. Y ciertamente, lo ha logrado.

Enrique Herreras. Levante

El trabajo actoral y de dirección es profundo e indagador. Una lucha encarnizada de un vendedor y un comprador que representan los vectores de la vida, la filosofía de los contrarios que se complementa.

Carlos Gil. Gara

Ficha artística y técnica

Estreno2001
RepartoCarles Montoliu (el Dealer) y Sandro Cordero (el Cliente)
EscenografíaDino Ibáñez
Diseño de lucesRafael Mojas y Félix Garma
VestuarioSue Plummer
Universo sonoroJoan Cerveró
FotografíaJordi Pla
Diseño gráficoMINIM Comunicación
Producción ejecutivaBegoña García
Dirección adjuntaSantiago Sánchez
DirecciónMichel López
Estructura metálicaTalleres Pascualín, S.L.
TapiceríaMasoliver
MaquinariaGonzalo Mateos
Coordinación técnicaLightExpo
Mantenimiento escenografíaZircó
Realización vestuarioSastrería Mallent Adolfo Dominguez
Una producción L’Om Imprebís con el apoyo de Teatres de la Generalitat Valenciana, Ministerio de Educación y Cultura de España y la Embajada de Francia. Con la colaboración del Proyecto Castelló Cultural.